“Vamos a certificar toda nuestra producción como ecológica”
En Betanzos hablamos con Luís Sande, al frente de Pagos de Brigante.
¿Quién y cuando funda esta bodega?
La fundé yo, en primavera de 2018.
¿Cómo llegaste al mundo del vino?
Yo soy jubilado de la Administración Pública. Actualmente somos mi hijo, Luis Sande Lage, y yo los que estamos al frente.
¿Recuerdas tu primera vendimia?
Fue en 2020, en el año de la pandemia de la Covid. En estos primeros años contratamos un especialista francés para que nos asesorara.
¿Algún recuerdo especial en tu vida al lado de las vides y los vinos?
Recuerdo que, curiosamente, a pesar de ser la primera vez y las circunstancias todas de ese año los vinos salieron fabulosos.
¿De qué áreas concretas vienen vuestras uvas?
De las parroquias de Tiobre, Brabío y Requián, en el Ayuntamiento de Betanzos, y de las de Quintas y Souto, en el de Paderne.
¿Con qué variedades de uva trabajáis?
Con ocho variedades: Blanca legítima, Godello, Agudelo, Palomino fino (blancas) y Mencía, Serradelo, Garnacha tintorera y Roibal (tintas).
¿Qué piensas que diferencia tu bodega, tus vinos, de otros?
Somos de los últimos en llegar y, al contrario que otros compañeros de la zona, tenemos una estructura empresarial. Además tenemos posibilidades de invertir y no tenemos prisa por obtener resultados, queremos hacer buenos vinos. También tenemos más superficie de viñedos que el resto, por lo que producimos más vino que los demás. Los nuestros creo que son vinos más afilados, con mayor acidez, de carácter más marcado. Y por otra parte, cuidamos también de manera especial la imagen gráfica, con etiquetas vintage diseñadas especialmente para nuestros vinos.
¿Cómo fue la evolución de la bodega a lo largo del tiempo?
Estamos centrados en los últimos tiempos en certificar toda nuestra producción como ecológica, algo que ya se da en la práctica a falta de cumplir con unos pocos trámites más.
¿Dónde vendéis principalmente vuestra producción?
Tenemos un distribuidor para A Coruña y Ourense, y en lugares como Santiago de Compostela o Betanzos vendemos directamente en tiendas especializadas o de delicatessen. Además, hicimos algo de exportación a países como Dinamarca o Japón.
¿Cómo veis el futuro? ¿Algún reto concreto en el horizonte?
Contamos que este año 2024 habrá una producción muy reducida por cuestiones climáticas. A medio plazo estamos a la espera de que “Picha”, el viñedo histórico que estamos recuperando tenga más producción. De hecho contamos con la ayuda del programa ECOSPHEREWINES de la UE para la recuperación de este terreno en armonía con la naturaleza; queremos que sea algo más que un viñedo y hemos previsto plantar frutales, poner colmenas e instalar pequeñas cabañas en las que pasar la noche. Plantar 10 hectáreas es duro, y queremos ir con calma y hacer las cosas bien.
¿Quieres recomendarnos algún maridaje especial de alguno de tus vinos?
Nuestros vinos tienen un carácter marino, de salinidad. Es por eso que casan bien con todo tipo de pescados blancos. Pero especialmente recomendaría nuestros godellos para tomar con percebes o, también, con comidas de autor o asiáticas.
